El 29 de agosto de 2025, se aprobó en el Congreso una serie de reformas a la Ley Federal del Trabajo (LFT) que buscan mejorar el equilibrio entre vida laboral y personal, alineándose con estándares internacionales de la OIT. Estas actualizaciones promueven el bienestar de los trabajadores y la productividad empresarial.
Cambios destacados:
Reducción de la jornada laboral: De 48 a 40 horas semanales máximas, con implementación gradual para empresas. Incremento en prestaciones: Aumento en días de vacaciones (de 6 a 12 en el primer año), permisos por paternidad extendidos a 15 días y bonos por productividad obligatorios. Normativas de salud y bienestar: Obligación de programas de prevención de burnout, teletrabajo regulado con derecho a desconexión y la “Ley Silla” para puestos de pie. Estrategias de contratación: Mayor énfasis en convenios de confidencialidad, cesión de invenciones y privacidad de datos personales de empleados. Prevención de litigios: Asesoría en reestructuras corporativas, despidos y subcontratación para evitar sanciones. Sanciones más estrictas: Multas por incumplimiento, con auditorías anuales obligatorias.
Entrará en vigor progresivamente a partir del 1 de enero de 2026.